29.12.07

A por Vallecas

Ya estamos a puntito de caramelo. Llega la carrera que, como todos los años, no es un objetivo principal de la temporada, pero que supone la mayor acumulación de nervios de cuantas carreras componen el calendario.
Se juntan varias circunstancias. Por un lado, una semana completa de vacaciones en la que da tiempo a darle muchas vueltas a la cabeza. Por otro, el hecho de saber que vas a correr rodeado de un montón de gente que tiene una fijación parecida, y animados por una cantidad ingente de aficionados al atletismo, aunque sólo sea por esa noche.
Finalmente, se trata de un recorrido bueno para correr un montón en la primera parte, pero sabiendo que en esos momentos durísimos de todo 10k que se precie, vas a tener la gracia añadida de cascarte las subidas vallecanas.



Esta semana es un peligro. No solo por los saraos, que también, sino porque el descanso que supone poder dormir todos los días más de ocho horas (¡!), entrenar a mediodía, recuperarse con una siestecita estupenda... invita a entrenar como un animal. Y, claro, eso no puede ser, porque entonces hipotecamos la carrera sí o sí.

Así que después de los 400 del lunes había ocho militos el miércoles. La idea era no pasarme de ritmo, hacerlos al ritmo de carrera para no cascarme. Obviamente, eso es imposible, y al final vas más rápido. No obstante, el hecho de ir solo, de que fuesen ocho, de tener viento en la recta de meta, y de que no iba con la cabeza de sufrir a ritmos muy altos, fueron ingredientes suficientes para no tener sensación de ir sobrao. Una media de 3'26'', y me imagino que Chema y el Tete, que estaban por allí haciendo dosmiles, debían de descojonarse para sus adentros, jeje.

El jueves, por mor de los descansos de que hablo, estaba como una lechuga. Había un extensivo que decidí no hacer en plano para no "malacostumbrar" a las piernas. Así que me fui a la Dehesa, a hacer un circuito que consiste en un tramo de 1750 metros llanos, unos 750 de subida, 500 metros de llano, y 750 de bajada. Las sensaciones fueron buenas, de ir rapidillo pero conteniéndome en todo momento.

Y ayer, viernes, un rodaje de 12 km "virando a intensivo", que diría el míster. 7 km tranquilitos, cambio de zapas para probar el material para la Sansil, y otros 5 km en los que metí 3 centrales por debajo de 4 mpk, cómodo.

Ahora toca descansar y esperar...

Powered by ScribeFire.

25.12.07

Arriba y abajo

Me acordaba a lo largo de la semana pasada de esta serie de TV de hace ya unos añitos. Para ser sinceros, no me acordaba realmente del contenido en sí de la serie, pues creo que me pilló siendo muy crío. Pero sí se me venía a la cabeza el título a medida que enlazábamos entrenamientos de muy distinto signo.



La cosa quedó en un 4x5x400 el miércoles pasado, hace ya casi una semana, en el que pude comprobar en las piernas la propiedad computativa, como di en llamar la diferencia que existe entre un 4x5 y un 5x4.

Pues bien, el jueves noté como una auténtica losa la acumulación de Aranjuez + 400's + 8km intensivos. Estos fueron tales en cuanto al pulso, pero no en cuanto al ritmo. Me subí al circuito de la Dehesa, un pelín pesado por la lluvia (no mucho), y me puse a darle. Al paso por el 500 vi que iba a 3'48'' con sensaciones de ir mucho más rápido y me dije: "la hemos liao, hoy toca sufrir...". Al final eso hice, aguantar el entrenamiento aunque fuese a un ritmo más bajo. Bueno, lo aguanté casi completo pero sin concluir por 200 metros, pues fue ahí donde me tuve que parar por miedo a que si aguantaba otros 45 segundos no me iba a dar tiempo a bajarme las mallas. Ya me entendéis... me parece que es un efecto pernicioso de la lluvia y el viento que soplaba, que tienden a enfriar la tripa.

El viernes, trote suave con sensaciones de ir muy pesado. Hasta aquí, dos días bajos, bajos.

Pero el sábado nos juntamos en el Cagigal Alberto, Paco, Dani y yo. En el plan ponía hacer 4 bosques, pero había ganas de quedarse en 3. A mi no me importó, pues como digo las sensaciones de los días anteriores no habían sido todo lo buenas que yo deseaba, por lo que prefería subir un pelín la intensidad -no mucho- y quitar un bosque. El caso es que al final me encontré muy bien: hicimos el primer bosque en 15:55, muy cómodo. Aquí Alberto decidió descolgarse para no forzarse en exceso, y seguimos nosotros tres hasta el 7, más o menos, que dejamos que Dani se fuese. Segundo bosque en 15:36, y finalmente apretamos un poco para hacer el tercero en 15:28. Como digo, buenas sensaciones. Y de repente el cuerpo, que a veces es un misterio, pasa de estar abajo a estar bien arriba.

El domingo rodaje suicida. No por los ritmos, sino porque hubo sarao del bueno hasta las 4, y habíamos quedado a las 8:30 en el Lago con la gente del foro. Menos mal que empezamos suavecitos, sacando una media total de 4:32, y sólo apretamos llegando de vuelta al Lago.

Link al MotionBased

En cuanto a ayer, me regalé un 5x4x400 de Nochebuena en el INEF. Las sensaciones fueron bastante positivas. Me junté con Eduardo Callejo, e hicimos un entrenamiento en el que en las repeticiones impares tiraba yo, y él iba muy relajado. En las pares tiraba él, y yo trataba de perder poco, de modo que siempre los 400 pares eran más rápidos que los impares. Llegué con la intención de empezar suavecito para no ir muy pasao en la SSV, pero al final fui apretando los dientes todo el entrenamiento. Así que creo que los miles del miércoles serán algo más relajados, al menos los primeros.
Los bloques salieron a 1:15.05 - 1:14.25 - 1:14.98 - 1:14.40 - 1:14.48
Como siempre digo, el sintético del INEF puede ser un pelín corto, pero en este caso tuve mucho cuidado de ir siempre por la línea de cal, así que no creo que haya más de un segundo de diferencia con un 400 "de verdad". Por tanto, me fui satisfecho y con la sensación de haber cumplido con el deber.


Powered by ScribeFire.

20.12.07

La propiedad computativa

¿ 5 x 4 x 400 = 4 x 5 x 400?

Obviamente, durante muchos años habría dicho que sí, que tal igualdad es cierta. Incluso me habría ofendido el solo hecho de plantear tal duda, pues veo que los dos términos de la ecuación están enmarcados por sendos signos de interrogación. La propiedad conmutativa de la multiplicación así lo asevera, de manera categórica.

Sin embargo, con el tiempo no sé si maduramos, envejecemos, o nos volvemos locos, pero el caso es que dejamos de ver las cosas como siempre lo habíamos hecho. Sirva como ejemplo más que evidente éste que presento. De unos años a esta parte ya me he dado cuenta de que lo que encabeza estas líneas no es una igualdad, ni nada que se le parezca. Y todo intento de que así sea se traducirá en un dolorcito muy rico de piernas, o bien un elegante hundimiento en la pista.

Como os podéis imaginar, hablo de darle a la zapatilla, de entrenamiento fraccionado, y aquí no se cumple la propiedad conmutativa, sino la computativa. Es decir, que cuanto mayor es el número de repeticiones agrupadas en un bloque, y a igual número de repeticiones totales al final del entrenamiento, más puto es éste.

Ayer, aunque el míster no se mostraba muy de acuerdo con las propinas, especialmente con esa generosidad que a veces nos caracteriza despachando euros a diestro y siniestro, no fue fiel a su palabra y nos regaló la propina de un 400 más en cada bloque, de modo que nos fuimos a un 4x5. A diferencia de otros días, dejamos las sábanas de lado desde el principio, con lo que le fuimos dando duro desde las primeras vueltas. Esto se tradujo en acabar el entrenamiento a menos, con las piernas aún acordándose de los jardines de Aranjuez. Eso sí, la media conjunta (1:16) fue la mejor de lo que llevamos este año, y eso con el agravante computativo encima. Por tanto, contento.

Luego nos dedicamos a la charleta sobre objetivos, propinas, horas de entrenamiento... y nos despedimos de Vicálvaro hasta, al menos, el 26, deseándonos felices fiestas. En mi caso es probable que el 26 tampoco me acerque por allí, y entrene por la mañana. Pero ya veremos...

17.12.07

No pudo ser

Ya llevaba tiempo sin escribir por aquí: más de una semana.

La pasada estuve de nuevo en uno de los módulos del curso. En este caso la cosa fue llevadera, pues comprendía sólo dos días de sesiones, y uno adicional en el que el grupo de nuestro proyecto nos juntamos para trabajar y darle un empujoncito al currele. Además, como tocaba semana tranquila, se hizo menos duro entrenar, y es que lo de hacer calidad a las tantas de la madrugada es duro. Finalmente, como en esta ocasión nos tocaba en Hitchin, al noroeste de Londres, contaba con la ayuda adicional de esa hora de menos que tienen los relojes británicos, por lo que al filo de las ocho había buena luz para rodar.

Tocaron tres rodajes, el primero un poco más rapidillo; el segundo con dos partes diferenciadas (6 km suaves y 4 km a ritmillo cómodo); el tercero suave en su conjunto. No salieron malos ritmos, con sensación de ir muy cómodo, lo que aumentaba mi confianza para Aranjuez. Este optimismo se refrendó el sábado cuando en el precompetitivo notaba que se me iban las piernas y tenía ganas de correr. Por mucho que me frené, cayeron los 6 km del sábado a 4'12''. ¿Fue un error?

El caso es que, sea como sea, nos plantamos el domingo en Aranjuez con una bandada de grajos volando muy bajo, concretamente a -2ºC. Hasta que empezamos a calentar la mañana fue una mezcla de cálidas palabras y encuentros con montón de conocidos, por un lado, y de gélidas manos, congelados pies, y frío que se colaba por todas las costuras de la ropa. Con el calentamiento fuimos poco a poco entrando en eso, en calor (si no no se llamaría calentamiento, digo yo), y a eso de las 11:55 me coloqué en la salida, bien colocado y al ladito de BornToRun, del foro, y sin conseguir localizar a los compis del CAR de Vicálvaro.

Puntualmente suena el disparo, y salimos rapidito pero sin ir a pijo sacao, picando un primer kilómetro en 3:22. Cogemos la subida tendida que desemboca en la recta de bajada hacia la izquierda, que nos llevará hasta la arboleda, y pasamos el k. 2 en 3:28, quizá un pelín largo. Aquí voy con Vicente, al que había encontrado a los quinientos metros de prueba, siguiendo al grupo de Dani, Chuky y Mario, que irían poco a poco alejándose.

Al ver el 2 en 3:28, subimos ligeramente el ritmo, para pasar por el 3 a 3:26 (10:16 acumulado). Me encuentro bien y voy paulatinamente pasando a corredores, avanzando puestos y sin bajar el ritmo. K. 4 en 3:28, y enfilamos la entrada a los jardines para pasar por la casa del Labrador, punto medio de la carrera, en 3:25, acumulando justo 17:10 en ese momento.
8 segundos más que en el 2006, pero entonces salimos algo adelantados respecto de la línea de salida, por mor de la mala organización.

Me siento bien, forzado, como debe ser, pero siendo capaz de engancharme a los relevos que me voy dando con un corredor de la Dehesa Boyal, que nos permiten mantener el ritmo. Así las cosas, en este paisaje privilegiado marcamos el 6 y el 7 en 3:29 (24:08 acumulados) y pienso que no se me escapa el sub-35', primer objetivo en mi cabeza.

Aquí me uno a Carlitos_guay, y entra en la carrera Viren para acompañarnos hasta casi meta (muchas gracias, fiera). Y cuando pienso que con un hacer un kilómetro más a 3:30, esto está hecho, aparece el Sr. Mazo y me mete un hostión tremendo en la cabeza. La recta tras la salida de los jardines es larguísima, eterna, de modo que el 8 se me va a 3:35, el 9 (con la cuesta) a 3:43, y el último km a 3:37, para marcar 35:03 en mi reloj, 35:05 oficiales.

Me fastidian esos 3 km finales, que de haber sido como el año pasado (3:30 - 3:37 - 3:31) me habrían dejado en 34:45 - 34:50, pero no ha podido ser. Es decir, hasta el 7 fui con los 10 segundos de diferencia respecto del año pasado que se pueden achacar a la salida. Luego, se fue todo. Quizá la explicación es que falta ir acumulando entrenamientos, que de momento no puedo ir al ritmo de hace justo un año durante 10 km, aunque seguramente si disputase un 5000 sería más rápido que hace un año.

También hay que tener en cuenta que es la primera competición de asfalto de la temporada. Toca ir cogiendo la forma poco a poco, además de que llevamos mucho entrenamiento y sólo una semana verdaderamente relajada. No me quejo, ni muhco menos: es la planificación que quería, para poder correr en primavera y verano, que será cuando pillemos los mejores momentos. Pero claro, siempre apetece correr más, jeje.

Por lo demás, día estupendo en compañía de buenos amigos, especialmente de Jesús, que volvió tras su periplo de cinco meses en Sudán. No sé si flipaba más con las luces de Navidad, con el ordenado tráfico europeo, o con los 7 bajo cero que tuvo el sábado al aterrizar.

¡Ah! En el CAR todos tuvimos el día pelín torcido, con medio minutillo más que las cuentas que echábamos antes de la carrera.

Powered by ScribeFire.

9.12.07

Afinando

Eso es lo que vamos haciendo ya con la vista fija en Aranjuez.

Hoy tocaba hacer el 6 x 1000 rec:1'30'' que el resto hará mañana en Vicálvaro, y que yo me pierdo por viaje. Así que me he plantado con Luis en el INEF, con la intención de hacer el entrenamiento por el sintético.
Pretendiendo condicionar favorablemente el entrenamiento, me he levantado a las 8:30 para empezar a darle a la zapatilla a las 11:00, y así tener el cuerpo ya despierto.

Allí, en el calentamiento, nos hemos encontrado con Pedro Sanz y Eduardo Callejo. Al poquito ha aparecido Pedro (el gallego volador), y para completar la panda, el mítico Arnaiz se ha juntado cuando habíamos terminado con el calentamiento. Todos han seguido el mismo entrenamiento que teníamos planeado, aunque si bien Luis, Pedro Herbello y yo íbamos sufriendo, los otros tres, fruto de su clase, iban casi de charleta.

Ha estado muy bien, porque en la primera he tirado yo, y luego ya Eduardo, de modo que ha ido muy regular, haciendo casi todas las series pasando a 1:39 la vuelta. Así las cosas, tocaba apretarse los machos y aguantar lo que se pudiera. Afortunadamente, el viento nos ha respetado, y aunque se dejaba notar claramente, no ha sido el vendaval que teníamos por la tarde.

He conseguido exprimirme a base de bien, y los tiempos, pulsos y recuperaciones han sido:

1. 3:15,5 - 175 ppm máx - 91 ppm rec
2. 3:18,6 - 182 - 66
3. 3:18,5 - 183 - 57
4. 3:17,8 - 185 - 49
5. 3:20,3 - 186 - 46
6. 3:19,1 - 187 - 35

Sale una media de 3:18, si tenemos en cuenta que a las dos vueltas por la línea de cal les falta unos 3 segundos, nos ponemos en 3:21, que me deja satisfecho, la verdad. Tanto por los tiempos como por lo dicho anteriormente: me he sacado el zumito.

Y, sobre todo, por la excelente compañía en la que he entrenado. Por un lado la "élite", por otro los amigos.


Powered by ScribeFire.

8.12.07

7 días...

... y estaremos de nuevo a punto de cenar, sintiendo el cosquilleo en el estómago que precede a una carrera en la que centras tus esfuerzos. Esta vez Aranjuez va a tener ingredientes diferentes a otros años. El primero, y más importante, es que espero que esta temporada Aranjuez no marque mi cima diezmilera. No quiero decir que no tengo esperanza de hacer una buena carrera, por supuesto, pero la idea es que la planificación que llevamos nos ponga en un buen puntito para esta carrera y para la San Silvestre, pero que después sigamos mejorando el estado de forma.

Los dos años pasados alcancé aquí mi mejor rendimiento, después de acumular más de cuatro meses de entrenamientos, tres de ellos con sesiones de calidad (dos o tres a la semana). Esta vez no: ahora nos liamos la manta a la cabeza en Septiembre, y hasta Octubre no probamos unas series, y aún en monodosis. Por ello no sé si estoy para rondar el tiempo del año pasado -los entrenamientos indican que no debería de andar, o correr, muy lejos- pero esto es algo que ya se verá.

Otra diferencia es que en esta ocasión se trata de la primera competición de asfalto de la temporada; llego mucho menos fogueado, con sólo dos carreras controladitas (Behobia y Aranjuez) a ritmos cómodos, y una competición (Alcobendas). Como siempre, doble filo: voy a tener menos soltura competitiva, por así decir, menos coqueteo con el sufrimiento de la competición. Pero al mismo tiempo, me he quemado bastante menos.

Finalmente, esta vez será la primera ocasión en la temporada en la que haga una descarga de verdad en la semana previa, con dos días de descanso y todo. Las temporadas previas tenía descargas más repetidas, que coincidían con todas las carreras en las que participaba: Yuncos, Getafe, Socuéllamos, Alcalá, Rivas, Aranjuez. Así, probablemente note en estos días más soltura de lo normal en las piernas y habrá que tener mucho cuidado con los ritmos en los entrenamientos.

Desde Alcobendas hemos seguido dándole cañita al cuerpo: el lunes cayeron los 400. Mi idea al llegar a Vicálvaro era la de hacer todos a ritmo de mil, o sea a 1:22 más o menos, y sólo rondar el 1:20 en el último bloque. El primero, que siempre cuesta, fue justo en 1:22, pero luego ya no hubo manera. A pesar de ir a cola de grupo no había manera de hacerlos más lentos de 1:20, y como vi que podía ser mucha tela para las piernas al día siguiente de la competición, decidí hacer 4 bloques, corriendo un poco más en el cuarto, metiéndome en el grupo o incluso acercándome a la cabeza. Señalar que en este cuarto bloque los tiempos estuvieron a punto de quedar muy bonitos: 1:17.0 - 1:16.1 (vaya) - 1:15.0 - 1:14.0

El martes fue un día tranquilo, de transición, con 12 km tranquilillos y las piernas bastante cargaditas.

El miércoles tocaba dar el callo en forma de miles: ocho de nuevo, con la idea de salir más lento que el 3:23 del primer mil de la semana anterior. Esto no se cumplió del todo, pero sufrí menos y recorté casi dos segundillos la media (que fue un pelín más rápida que 3:25). Lo mejor, que las recuperaciones fueron buenas, bajando rápido el pulso (recuperaciones al minuto de 73, 67, 49, 50, 42, 37 y 36 ppm). Y como siempre, el hecho de hacerlas en grupo que ayuda a sacar de dentro las fuerzas cuando pareces flaquear (nos juntamos Mario, Dani, Paco, Alberto, Raúl y yo).

Tras el descanso, que pasé del viernes al jueves, tocó ayer hacerse un R3 que pensaba iba a salir un pelín más cómodo. Subí con Raúl al Bosque en una mañana de niebla preciosa. Calentamiento largo (casi 7 km), y al lío: salí un poco rápido (3:30 en el primer mil, que ya sabéis que pica hacia arriba, saliendo del 2), y luego costó mantener en torno a 3:40 para acabar en 21:56 (3:39).

Y hoy hemos sido una tropa de impresión, con la visita estelar de Pedro desde Galicia. Además, le hemos puesto la escenografía a tono para que se sintiese como en un bosque atlántico, húmedo, verde y cargado de niebla. Allí andábamos él, Mario, Chuky, Alberto, Mora, Luis, Vicente, Miguelo, Pino y yo. Cada uno ha hecho el entrenamiento de acuerdo a lo que tocaba y apetecía, aunque la tónica general eran 3 bosques a extensivo/intensivo. Hemos ido en grupito Mora, Luis, Vicente, Pino, Alberto y yo haciendo 2 bosques de 4:30 a 4:08 y buenas sensaciones. Luis y yo luego hemos enganchado la subida por el carril bici hasta hacer la bajada por el obús, rodear el Lago por fuera, y completar 17.600 metros. Muy bien. A ver si pongo el mapa para que Vicente sepa el recorrido alternativo :-)
Luego charleta estirando, Viren que se ha dejado ver para darme la chaqueta que mi mala cabeza perdió el día del Cangurito :-P, y hemos completado la mañana con unas risas a costa de donuts y red-bull, jajaja.

[Edito para poner el mapa del rodaje]
Rodaje 8/12/2007 at EveryTrail

Map created by EveryTrail:Share GPS tracks

Powered by ScribeFire.

4.12.07

En el Parque de Atracciones

Este año estoy viviendo cosas nuevas, diferentes y muy atractivas.

Algo a lo que le tenía echado el ojo, que quería disfrutar desde hace un par de años, es la temporada invernal de cross. De momento me había pasado por un universitario y (medio) Canguro, carreras que si bien se encuadran en la temporada de campo a través, no son novedades absolutas. En el circuito universitario ya había corrido, y el Bosque en que se disputa el Canguro me lo conozco al dedillo.

Pero ya sabía que Vicente recomendaba participar en el Cross de la Constitución de Alcobendas, y por eso lo tenía marcado en rojo en el calendario. Sinceramente, es una suerte haber seguido este consejo y haberme acercado a Alcobendas con él y con Dani. En una mañana meteorológicamente insuperable, disfrutamos de un rato de atletismo de verdad en un circuito duro, revirado, en buen estado, y sobre todo muy divertido.

La carrera consistía en la sucesión de cuatro vueltas de unos 2.500 metros. La salida se daba desde la parte más baja del parque. Junto a la zona de salida se encontraba la cámara de llamadas, a la que nos acercamos 15 minutos antes del pistoletazo y donde vimos que desentonábamos entre tantísima figura como se había concentrado. Y es que del plantel español no faltaban más que los seleccionados para el europeo de Toro, y también había buena representación extranjera, o sea, africana.

Vicente nos dijo: "Tras la subida de la salida, si queréis, corréis, pero hasta que coronemos os ponéis detrás de mi". Gran consejo, porque con la gente que había era fácil salir follao y morir a las primeras de cambio. Pero no, salimos tranquilos, obviamente los últimos del autobús, y con el giro a la izquierda al coronar la primera recta entrábamos en la vuelta propiamente dicha. Este tramo era de suave descenso de tierra, con zonas un poco húmedas pero no blandas. Y desde aquí entramos en el Parque de Atracciones, por la sucesión de subidas, bajadas, giros, cambios de ritmo... y porque en ese entorno, con el público, con todo, disfruté como un crío, de verdad. A pesar de que a ratos se sufría de lo lindo.

Digo que comenzaba el Parque de Atracciones tras la zona de bajada, bastante rectilínea: llegamos a un pequeño tramo llano desde el que enlazamos con un camino de tierra ascendente, en considerable pendiente, y que sube por una ladera al modo de una carretera de puerto, con giros enlazados de 180º (tres en total). Al llegar arriba, un poquito de llano y descenso para entrar en una zona de césped en ligero ascenso, hasta llegar a una especie de plazoleta de arena con columpios.

Desde aquí enlazamos con la parte más revirada del circuito: entramos en el césped de nuevo, subimos una cuesta muy empinada, y llaneamos/bajamos hasta seguir el contorno del Lago, en una ladera contraperaltada, y finalmente llegando a un giro a la derecha que nos lleva a un repecho muy fuerte, que coronábamos casi andando.

Alcanzado este punto, se seguía girando, curveando y serpenteando, pero en una zona más llana, terminando por vovler a la arena que nos lleva de nuevo a la zona de meta, y al principio de la siguiente vuelta.

La primera de estas vueltas dio la sensación de ser cómoda (9:28), y de hecho la segunda fue más rápida (9:19). Hasta aquí, fenomenal, dándome relevos muy productivos con Dani. Luego no le pude seguir, y se fue yendo poco a poco a medida que yo perdía algo de comba en las vueltas tercera y cuarta (9:33 y 9:40), pero sin llegar a petar. Quizá, y sin quizá, ayudado por los ánimos y fotos de Juan, Ygor, Txamo...

Lo dicho, un placer, para otro año toca repetir:





Y ayer, pues nada, cayeron los 400 con calma. Me hice un 4x4 en lugar del 5x4, sin quitarme las zapatillas tochas ni las mallas. Empezamos muy tranquilos y sólo me animé en el último bloque (medias de 1:19 - 1:18 - 1:16 - 1:15), si bien es cierto que las piernas se notaban un poquito pesadas, especialmente los gemelos (imagino que por mor de los clavos).

Hoy, 12 km muy tranquilitos con buenas sensaciones de arriba pero con las patas aún algo perjudicás.

Mañana de nuevo miles.



Powered by ScribeFire.

Marchando una de Noviembre

Pasó el mes de Noviembre. Tradicionalmente se trata de uno de los meses en los que mejor entreno, por la buena temperatura que hace, ni mucho frío ni mucho calor; porque aún pillamos al cuerpo con muchas ganas de darse caña; y, además, porque es el momento de ponerse en forma y resulta muy agradable ver cómo los tiempos de los entrenamientos van mejorando, el pulso baja, las sensaciones mejoran...

Este año ha sido un poco diferente. Ya digo que entre todas las cosas nuevas que estoy disfrutando con el paso al Paris, o a donde sea :-), una de las más significativas es que la periodización del entrenamiento ha cambiado. Comenzamos con muchos más días de fuerza, poca calidad, y hemos ido entrando de manera muy progresiva en la rutina de las series y los controlados, poco a poco abandonando las cuestas, la gimnasia, la técnica de carrera y el gimnasio. No obstante, son cosas que aún no han desaparecido del todo, e incluso esta semana espero darle un poquito a los hierros.

El resto de Diciembre creo que lo dejaré, para afinar y llegar bien a Aranjuez y la Sansil.

Justo los últimos días de Octubre y primeros de Noviembre fueron el comienzo de los dos días de series por semana, de modo que hasta el 25/11 el esquema básico de entrenamiento fue de:
- Un día de series de 300
- Un día de series de 800
- Un día de rodajes fuertes controlados
- Un día de cuestas
- Un día de gimnasio
- Rodajes

Desde el 25 ya hemos entrado en un ciclo de 400, 1000, y ningún día de cuestas.

El resumen del mes es el siguiente:

- 29 sesiones de entrenamiento (de 30 días)
- 398 km (frente a 338 en Septiembre): 13,7 km por sesión
- 28h 34m 41s de entrenamiento (media: 4:18,2km)

- Distribución de kilómetros:
  • > 4:50 - 79 km (19,8%)
  • 4:25-4:45 - 68,5 km (17,2%)
  • 4:10-4:25 - 105,6 km (26,5%)
  • 4:00-4:10 - 40,9 km (10,3%)
  • 3:50-4:00 - 8,0 km (2,0%)
  • 3:40-3:50 - 30,7 km (7,7%)
  • 3:30-3:40 - 8,0 km (2,0%)
  • < 3:30 - 57,8 km (14,5%)
- Por tipo de entrenamiento:
  • Rodaje: 234,7 km
  • Series < 500 m: 21,5 km
  • Series 500-2000 m: 27,2 km
  • Calentamientos / enfriamientos: 70,8 km
  • Rodajes controlados: 43,3 km
Powered by ScribeFire.

Powered by ScribeFire.

28.11.07

Función social

¿Cuántas veces no habremos oído eso de que las señoras de vida alegre, lumis, prostitutas... cumplen una labor social? Sí, que si el ministro de turno se lleva a matar con su señora esposa, y al menos se desahoga con una de estas muchachitas, igual al día siguiente todos salimos beneficiados. Vamos, que no descarga su ira contra el pueblo porque llega al despacho con la testosterona en su sitio.

Pues en Vicálvaro, al menos en el polideportivo, no hay un burdel de reciente instalación, ni nosotros nos acercamos al tartán a vender nuestro cuerpo (dicho sea de paso, poco íbamos a sacar). Pero hoy algunos hemos cumplido una función social, más que entrenar.

Iba yo con ganas, lo que demuestra que el cuerpo está agilipollao, y que los días que llega dormido salen buenos entrenamientos, y viceversa. Pues nada, hoy había dormido bastantes horas y muy bien, me encontraba fresco, así que iba con buena disposición al calentamiento. Sin embargo, ya aquí he notado una pesadez de piernas poco halagüeña.

Hemos empezado con los miles, con el primero en 3'22.9", y ahí ya me he dado cuenta de que no era el día: sin que el pulso subiese en exceso, las piernas iban cascadas de verdad. Quizá la suma del Canguro (sólo 4 km, pero rapidillos), los 400, y el rodaje de cuestas de ayer. Quizá. Sea como sea, al terminar la segunda repetición en 3'23.9" sufriendo como un perro, sabía que la cosa iba a ser dura. El fantasma del abandono que va y viene, va y viene.

Hemos bajado un poco el ritmo, y Paco ha hecho su contribución a la labor social a base de ir repitiendo con una seguridad absoluta y contundente, al final de cada mil: "venga, sólo quedan cuatro", "venga, sólo quedan tres". El escuchar su determinación para terminar el entrenamiento ha sido lo que ha tirado de mi en todo momento.

Y luego nos ha tocado a nosotros dos hacer esa labor social: mientras Mario iba muy suelto por delante, Vicente y Dani se han puesto en la sexta con nostros, con la idea de coger un poco de fuelle y llegar al final del entrenamiento sin morir en el intento. Una vez más, la labor social del grupo.

Al final he terminado sufriendo un montón, pero volviendo en el último mil a tiempos parecidos a los del principio (3'25''), logrando una media de unos 3'26'':

1. 3:22.9 (173 ppm máx, 89 ppm rec)
2. 3:23.9 (178, 115)
3. 3:28.0 (180, 121)
4. 3:27.5 (182, 121)
5. 3:26.9 (181, 122)
6. 3:29.5 (181, 122)
7. 3:28.3 (181, 122)
8. 3:25.3 (181)

Parece que los datos muestran a las claras que iba petaíto de piernas, lo que quizá impedía subir el pulso más. No sé, son elucubraciones y pajas mentales, pero es la conclusión a la que llego.


Powered by ScribeFire.

27.11.07

Dies Lunae

Pronunciado algo así como /díes lune/, no hay más que un pasito breve a nuestro Lunes, el día consagrado a la Luna en época romana. Y ayer de verdad que parecía absolutamente eso, un día, una noche más bien, entregada a nuestro satélite. Se la veía allá arriba, orgullosa y enorme, como riéndose de la temperatura aún tibia que teníamos a esa hora, y preludiando la pelona que pronosticaban Mario y Vicente, y que de hecho ha caído esta noche -en mi barrio se veían buenas capitas de escarcha en los capós y lunetas de los coches-.

Como digo, ayer la temperatura era más o menos tibia, pero aun así no prescindimos de al menos un par de capas de ropa para meternos entre pecho y espalda el 5 x 4 x 400. Como os podéis imaginar, esto a algunos nos cuesta más que a otros. Chuky debía de estar con prisa porque se apretó sus 400 cuando nosotros estábamos empezando a calentar. Pero claro, él tiene el doble de espacio entre el pecho y la espalda que el que tengo yo, con lo que le caben los 400 holgaditos. Son las cosas que tiene el currarse en el gimnasio, y encima poder lucirlo con la camiseta ajustada :-)

El resto comenzamos algo más tarde, dispuestos a honrar a tan ilustre visitante -la Luna, no el Chuky, que es ilustre, pero no visitante, que si le llamamos visitante va a parecer un lagarto de V- con un porrón de vueltas a la pista: 8 km en total. Así que bien pertrechados con camisetas, mallas, buffs y aliños varios, nos dispusimos a darle cera a la zapatilla. O, como dice el míster, nos pusimos al lío. Buen grupito, homogéneo y compacto en los tres primeros bloques, formado por Vicente, Mario, Alberto, Dani, Javier y el menda lerenda. Me gustó que fuimos haciendo los bloques en progresión, y que entre que el vendaval no era excesivo, y que nos relevábamos al tirar en las series, no nos comimos demasiado lo que soplaba en la contrarrecta (que desde luego que no debía de parecerse nada al día aquel de las banderas horizontales).

Fueron cayendo los 400, y al final la prudencia indicó a los que habían competido y tenían molestias que era mejor quedarse en 16. Vicente, Javier y yo seguimos hasta el final, disfrutando un último bloque más rápido. Los tiempos, pulsaciones máximas y pulso al comenzar la siguiente repetición:

1.- 1:19.3 (172, 86) - 1:17.8 (175, 90) - 1:19.7 (174, 92) - 1:18.2 (175)
2.- 1:19.8 (174, 95) - 1:15.5 (176, 99) - 1:17.2 (177, 96) - 1:18.5 (175)
3.- 1:17.7 (173,106) - 1:16.3 (177,110) - 1:15.8 (180,103) - 1:17.6 (179)
4.- 1:15.3 (179,126) - 1:14.9 (180,122) - 1:13.8 (181,129) - 1:16.3 (180)
5.- 1:15.7 (178,129) - 1:14.7 (179,132) - 1:14.2 (181,127) - 1:13.9 (182)


Powered by ScribeFire.

25.11.07

Sudor, sangre... y lágrimas

No lo pongo en el orden habitual, sino en el puramente cronológico.

Hoy era el día en que por fin tocaba estrenarse en carrera, probar cómo van las cosas tras muchos entrenamientos, y el lugar elegido era el cross del Canguro en la Casa de Campo. Un entorno conocido, un circuito mil y una veces recorrido y sufrido (el cuatromil del Bosque, al que habíamos de dar dos vueltas), y un buen puñado de amigos y conocidos para disfrutar de una buena mañana de atletismo. El día acompañaba, pues el único pero era un viento del Norte que queda bastante amortiguado en el interior del pinar, por donde la carrera discurre. Por lo demás, cielo despejado, buena temperatura, día luminoso...

Tras un calentamiento en el que hemos recorrido el circuito en sentido inverso, hemos hecho unos progresivos y nos hemos dispuesto en la salida. En el arranque hemos salido rápido, todos buscando un lugar en el que ubicarse de manera más o menos cómoda; cosa que no resultaba fácil por la afluencia de corredores y porque todos pretendíamos lo mismo. De hecho, en la primera bajada iba yo un poco acojonao, porque el piso es irregular y no veía nada, así que casi corría por intuición. Y en la curva del 500 alguien detrás de mi creo que se ha comido de lleno un árbol. ¡Qué daño!

Hemos formado ya grupito en la subida de la contrarrecta, en el que viajábamos Dani, un corredor del Suanzes, y muy ligeramente retrasados Ángel y Viren. La cosa iba bien, me encontraba cómodo, e incluso la subida del 2 al 2,300 se ha dado bien. SUDOR, pero controlado y con la sensación de ir dominando el ritmo. Pero al poco me he dado cuenta de que tenía sangre en la boca. Estaba sangrando por la nariz, y en un rato, tras pasar por el 3, he visto que se me llenaban las manos, la nariz y la cara de SANGRE.

He empezado un debate conmigo mismo: no sabía si detenerme por prudencia, o si seguir hasta el final. Intuía que no sería nada grave, pero al mismo tiempo me encontraba incómodo y tenía la ligera incertidumbre de si la cosa podría ser algo más seria. Y por encima de todo, la sensación de derrota que sé que me quedaría si me retiraba.
Al final, al paso por meta, en el 4, me he parado (14:04), y al rato he conseguido detener la hemorragia.

Pero lo que no ha parado ha sido la rabia y la mala leche que se me ha puesto: LÁGRIMAS, aunque fuesen figuradas. A toro pasado, creo que la cosa se debe a que esta semana he estado con la garganta y la nariz un poco irritadas, lo que puede haber dado lugar a la hemorragia durante el esfuerzo.
Creo que, por las sensaciones que llevaba, habría sido difícil doblar, pero el segundo bosque no se habría ido demasiado, por lo que la carrera por debajo e 28:30 estaba en mi mano. Pero no lo puedo asegurar ni lo he podido constatar, así que sigo con esa rabia encima.

En fin, a ver si la semana que viene puedo competir bien en Alcobendas.


Powered by ScribeFire.

22.11.07

Vaya con la descarga...

Estaba yo feliz al final de la semana pasada, porque estaba pasando el momento de más carga de este ciclo en que nos encontramos, y si bien los 300s de hace diez días fueron difíciles, los 800s me dejaron muy buenas sensaciones, como ya dije.

El sábado hice un rodaje con sensaciones de comodidad absoluta a pesar del frío que hacía en París a esa hora. El escenario fue el Bois de Boulogne, donde disfruté de un panorama precioso, de tonalidades marrones, verdes, amarillas, pardas... y blancas, merced a la helada que había caído. En total fueron un poco más de 19 km a un ritmo aproximado de 4'12''/km.

View Larger Map
El domingo tocó disfrutar, con mayúsculas, de una carrera que me resulta bonita, y poco a poco incluso entrañable. Los 10 km de Alcalá en que el año pasado rocé el sub-35', y que este año me he tomado como un entrenamiento para hacer 10 km rapidillos. Acompañaba a Juanagus, que quería bajar de 38' y acercarse a los 37'. Como llevaba bastantes kilómetros en las piernas, no estaba yo seguro de aguantar sin problemas el ritmo de 3'42''/km, pero el caso es que me sentí bien, con ganas y sin dificultades.
El tiempo final fue de 37:02 a 168 ppm de media, lo que me parece un dato esperanzador (como ya digo, en los 10k vengo a competir en torno a 180 ppm de media).
Os dejo una fotito del grupo en el que íbamos en la primera vuelta, con PRR, también forista, y con Ramiro Matamoros, un histórico donde los haya:


View Larger Map
Y bien, el lunes me las prometía felices con la descarga, con un 4 x 4 x 300 que habría de ser mucho más "fácil" que el 5 x 5 de la semana anterior. Pero el caso es que anduve un tanto atrancado. ¿La razón? Creo que la combinación de tres factores:
1. Volumen acumulado
2. La carrera del domingo: fui cómodo, pero al fin y al cabo son 10km a 3'40''
3. Varios días con la garganta un poco "rara", con sensación de tener un catarro latente

El martes descansé por cuestiones de curro, y ayer fueron los 6x800, que costaron porque los hicimos más rápido que cuando son 8 o 10 repeticiones, claro. Empezamos más suavecito, a 2'43'', y en la segunda me pasé de listo, tiré, e hice 2'38.8'', que es mi 800 más rápido en un entrenamiento (paquete que es uno), de modo que el resto fueron en caída libre, jeje: 2'40''-2'41''-2'41''-2'42''. Al menos acabé sin que se fuese el ritmo a tomar por saco, y con mejor media que en las semanas previas.
Como nota positiva, destacar que parece que lo de la garganta remite, si bien hoy llevo todo el día con la cabeza un tanto abotargada. Son las cosas de ponerse en forma en invierno, jejeje.

Powered by ScribeFire.

15.11.07

El isotónico

Ayer parece que todo el mundo en el curso estaba un poco saturado de tanta charla, presentación y curro. Fuimos a ver una sede de la empresa en Les Mureaux, guiados por una francesita a la que le pediria gustoso que me diese clases para mejorar la lengua :-D

Luego, tras la cena, un poquito de fiesta de la mano de una guitarra, un poco de azúcar, limas y unas botellas de ron. También le dimos a un juego de cartas muy interesante: SET.

El caso es que el poquito de fiesta se prolongó, y el ron dio de sí bastante, con lo que esta mañana, a las 6:20, tenía la cabeza un poco espesita. A esto le sumamos un dolor de sóleos que no termina de irse, y el fresquito matinal (2º) y tenemos como resultado que me he plantado en la calle con la idea de que el entrenamiento (10x800 rec:1’) sería cutrecillo y a ritmo pedalero.

Vamos, que pensaba que empezaría a ritmo de 3:45 o así para entrar en calor e ir bajando. Pero no me he encontrado mal, la verdad, y parece que el ron de ayer ha actuado como isotónico. El caso es que sin sufrir en exceso, más que en las últimas repeticiones –claro-, han ido cayendo los 800 en compañía de la oscuridad y un par de perros con sus dueños que por allí pasaban. Los tiempos, 2:46,8 – 2:47,1 – 2:41,5 – 2:46,6 – 2:42,6 – 2:41,7 – 2:41,4 – 2:43,7 – 2:45,0 – 2:40,0.

O sea, bien, satisfecho y con es desayuno ganado. Aun así, hoy no he tomado ná de ron, y espero levantarme mañana de manera ideal para rodar tranqui un ratito.

Por cierto, fotito de la Behobia con la nueva equipación, jeje:




Powered by ScribeFire.

14.11.07

Una batalla perdida

Me podrán decir que los entrenamientos son duros.
Que salir a darle a la zapatilla todos los días es difícil.
Que si encima tenemos una semana de curso por delante, con horas y horas de formación, con trabajo en todos los momentos en los que no hay charlas… la cosa se hace muy cuesta arriba.
Que cuando suena el despertador a las 6:30, de primeras, son enormes las tentaciones de darle un buen golpe y pasar de él, quedarte en la cama disfrutando de otra horita de sueño que sabes que te va a venir muy bien, que casi seguro que será necesaria, no sólo conveniente.
Que ponerte en la calle en medio de la oscuridad, con una temperatura rozando el cero, es más propio de locos e inconscientes que de personas en su sano juicio.
Pero estas opiniones son las de aquellos que no saben, que no se imaginan, que la verdadera dureza reside en comer a las 12, tomarse una copita de vino durante la comida, y volver a las charlas a las 13:30. Eso, luchar contra la modorra, el hastío, el sueño tirano, es lo verdaderamente duro. No hay Dios que pueda con ello, y por mucho que te empeñes sabes que es una batalla perdida. Entonces piensas en el sueño perdido, en la paliza adicional de esta mañana (madrugada), en la noche pasada en la que te quedaste currando hasta las doce, y te das cuenta de que hay muchas maneras de definir la locura.
Eso sí, prefiero la primera modalidad de la demencia. Eso de luchar contra el sueño sin poder echarme una siesta es superior a mis fuerzas.

A pesar de todo, mañana volveremos a darle a la zapatilla, luchando contra la oscuridad, el frío, y el dolor en los gemelos :-D


12.11.07

Behobia - San Sebastián

Redactado el domingo 11, publicado el lunes 12:

Vaya pedazo de carrera. En todos los sentidos: bonito recorrido, organización perfecta, cantidad de corredores, acumulación masiva de gente animando en la carretera; tiempo meteorológico, el fin de semana completo en San Sebastián… un lujo.

El sábado fue un día largo, de madrugón (a las 4:50 arriba), pero de viaje rápido, o eso me lo pareció porque me lo tiré casi de continuo planchando la oreja.
En Donosti dejé las cosas en la pensión y me fui de rodajito de 14,5 km, cómodos, a 4’20’’ aproximadamente, incluyendo una subida –dura pero preciosa- al Igeldo.
Luego, recogida de dorsales y comida en la muy agradable compañía de Scop y su pupila Lola, por un lado, y de los recientes padres Sergio (Suro) y Pili. Además, el Vallés de Antxón nunca falla, especialmente sus croquetas y su tortilla de bacalao con perejil.
Siesta y otro pirulo por la fiesta del corredor para comprar los billetes del Euskotren y ver el ambiente que se cocía. Nos vimos con Lupasi, que nos preguntó por la tropa del foro y por nuestros objetivos.
De ahí a la cena (sin obsesiones: nada de pasta, sino ensalada y souflé de berenjena), y a descansar.

El domingo quedé temprano con Suro, los dos somos del género cagaprisas y preferimos hacer los deberes prontito para evitar agobios. Calentando nos vimos con Witakher, con Goros, Jorge Sanz… y a diez minutos de la salida tomé mi plaza en el cajón de los dorsales amarillos. Me daba vergüenza pensar en salir a 4 mpk y tener al lado a Chema, a Ziani y a otros cuantos estilizados korrikolari.
Por allí está Abraham Olano y Lupasi, que dice verme fino, y con quien me deseo suerte mutuamente. Estaré fino, pero al ponerme en la línea de salida llevo ya 82 km en la semana, jaja, y pienso en retener todo lo posible los caballos.

Con la salida veo que rápidamente nos ponemos a buen ritmito. El primer kilómetro es muy corto, además vamos entretenidos con el montón de corredores que nos rodean, y vemos sorprendidos a un tío que va en pelotas, literalmente. Sólo lleva una cuerdecita para sujetar el dorsal. Qué huevos. Digo que qué valor, en los huevos no me llegué a fijar cuando nos pasó.
A pesar de que el primero sea corto, el Fore lo canta en 3:45, y los siguientes, en subida, en 47 y 53. Voy muy cómodo, pero pienso en levantar el pie. Lo que ocurre es que es casi imposible: en cuanto aflojas te empieza a pasar un montón de corredores, y tienes la sensación de ir parado, por lo que tiendes a avivar el ritmo sin quererlo.
Al salir de Behobia abandonamos el pasillo de gente que ya, a estas alturas, se había formado entre los kilómetros segundo y tercero.
Tras la subida, vamos bajando poco a poco por toboganes, y paso el k.5 (por el Fore) en 18:59. Tócate las narices, pensaba llegar a Miracruz (k.17) en 1.08:00 y ya me he adelantado un minuto.
En el 6 la imagen es espectacular, con un mogollón de gente que anima en los laterales de una carretera flanqueada por una arboleda densa, otoñal, de colores amarillos, ocres, marrones… una preciosidad y no puedo evitar sonreir al disfrutar de esta belleza.
El 7 y, sobre todo, el 8, son otra cosa: subida a Gaintxurizketa; como voy cómodo, en este tramo paso a bastante gente, incluido el tío del movimiento pendular, o sea, el despelotao. El 8 se va a 4:13, pero empezamos a bajar y a entrar en otra zona de toboganes que tienden a perder altura. Así, el paso por el k.10 lo hacemos en 38:13 (19:14 de parcial), y vamos poco a poco acercándonos al puerto.
A estas alturas veo que la gente no se centra en las bajadas, sino que se aposta en los laterales de las subidas, donde más falta pueden hacer sus ánimos. Los agradezco y choco manos con multitud de chavales. Al mismo tiempo, estoy en un grupito con la segunda chica –de Laredo, pelirroja, me suena de verla en la carrera del pasado mes de Marzo-, y cada diez metros escuchamos un “¡Aupa, neska!” que se repite sin parar. Igualmente, “¡Oso ondo!” u otras frases de ánimo.

Tras concluir el paso por el puerto (k.15 en 56:57, parcial en 18:44), enfilamos la subida, más corta pero realmente empinada, al alto de Miracruz: pasamos dos kilómetros en 3:47 – 4:11, y ya sólo toca bajar y llanear. Desde el principio de esta última subida, la cantidad de gente en la carretera es increíble, y a ratos es similar a la concentración de espectadores en Vallecas. Creo que no hay más densidad en general, pero claro, en la SSV se ponen sobre todo en la Avda. Ciudad de Barcelona y San Diego, o Carlos Martín Álvarez, pero aquí están repartidos a lo largo de 20 km. Y claro, entrando en San Sebastián la aglomeración es increíble. Cómo disfruto corriendo en esta ciudad.

Paso el 20 en 1.15:40 (parcial en 18:43), y con los 200 metros finales pico 1.16:22 en la meta.

Conclusiones: muy contento porque me he encontrado bien, reservón pero no trotón, claro. El pulso medio de los kilómetros ha sido de:
1 – 147
2 – 162
3 – 166
4 – 168
5 – 168
6 – 168
7 – 171 (principio de subida a Gaintxurizketa)
8 – 174 (segundo kilómetro de subida)
9 – 171
10 – 169
11 – 172
12 – 167
13 – 168
14 – 168
15 – 168
16 – 170 (principio de subida a Miracruz)
17 – 173 (coronando Miracruz)
18 – 171
19 – 170
20 – 171

La media, 168; en un 10k suelo competir a 180 ppm de media, y en medio maratón, a unas 175 ppm. Vamos, que iba con reserva.
Lo único es que ayer sábado, en el rodaje, notaba las pesas en los gemelos, y hoy los tengo cansadetes. Imagino que mañana, de madrugada, habrá que hacer el 5 x 5 x 300 con un poquito de tiento.
¡Ah! El tiempo. Qué delicia: 3º al llegar a Behobia, convertidos en 12º al entrar en San Sebastián, con un sol reluciente, sin viento, sin una nube en el cielo…

Lástima que esta carrera no sea en Febrero…

10.11.07

Nos vamos a San Sebastián...

... pasando por Behobia, claro.

Madrugón al canto para coger el avión y llegar prontito a Donosti, que hoy toca aprovechar el día. Espero dar alguna cabezada durante el vuelo y echarme una siestecita allí.

El plan para hoy será el siguiente:

8:00 - Llegada al Aeropuerto
9:00 - Llegada a San Sebastián
10:00 - Después de dejar las cosas en la pensión, rodar una hora tranquilo (ayer al final cayeron casi 13 km incluyendo dos bosques con sensación de ir cómodo, pero que al fin y al cabo fueron más rápidos de lo esperado: 16:40 + 15:41)
12:00 - Ducha y cabezadita
14:00 - A comer y darme un paseo

Por la tarde habrá que recoger el dorsal, y a ver si consigo verme con Suro, con Santi Palillo, Lander, Paco Malagueta...

La verdad es que estoy muy ilusionado, y casi casi me apetece competir de verdad a pesar de la distancia. Nos contendremos, que ya llegará el momento de darle duro de verdad a la zapatilla.

¡Ah! Y de paso, a estrenar las nuevas equipaciones:





Powered by ScribeFire.

8.11.07

Restando un poquito más

Me está dejando realmente satisfecho esta semana. El lunes comenzamos con unos 300 muy majetes, en los que se mejoraron mucho los tiempos que había hecho siete días antes. Una de las principales razones fue la ausencia de viento: entonces, esta circunstancia nos hizo aflojar bastante en un par de bloques para poder ir bien resguardaditos. El pasado lunes, sin embargo, fuimos todos con las pilas puestas y no nos relajamos nada.

Ayer volvimos a disfrutar de un entrenamiento en calma chicha atmosférica, y la combinación de esto, y un probable incremento paulatino de la forma, hizo que los tiempos mejorasen notablemente. El 8 x 800 volvió a ser con un minutito de recuperación, y de nuevo hicimos un buen grupito en al menos la mitad de las repeticiones: Dani, Mario, Vicente, Paco y yo, más la presencia de los velocistas o mediofondistas en dos de cada 800, dado que ellos se enganchaban en el 600.
Esta vez tampoco pude seguir a los galgos, claro, pero la caída fue menos estrepitosa, mantuve mejor el ritmo, y sobre todo, tuve una sensación de sufrimiento un pelín menor. Al final, ritmo medio de 2:42,2 en lugar de los 2:44,3 de hace siete días. Satisfecho, por lo tanto.

De hecho, en la última conseguí recortar respecto de las anteriores, cosa que no había logrado la semana anterior. Muy lejos del 2:28 de la cabeza, pero al menos bajando de 2:42 gracias a la ayuda de Raúl.

Para parecer güeno, jeje, allá va la gráfica del entrenamiento. Lo mejor, en mi opinión, no es sólo que mejoro los tiempos de hace una semana, llegando a subir un pelín más el puslo, sino que en todas las repeticiones consigo ver caer el pulso más en la recuperación.
A ver si sale buen invierno, jeje...




Powered by ScribeFire.

6.11.07

A rajatabla

Será que me temo que la próxima semana, de nuevo de picos, digo de cursos pardos, va a ser difícil poder cumplir como está mandado. Pero parece que de momento trato de hacer caja y acumular entrenamientos según lo planificado, que no es poco.

El domingo, después de haber quedado satisfecho con el R3 del sábado, tocaban 20 km. Los comencé con un amiguete al que esperaba poder llevar a unos 4:30 (anda por los 41 minutos en 10k), pero me da la impresión de que se ha dejado de la mano de Dios, y sufrió más de la cuenta para completar 10 km en 48:20. También es cierto que los hicimos ganando altura: pasamos del Cagigal a las vías del tren, de ahí al puente de la Garrapata, subimos por la Tapia al bosque, y allí nos hicimos los 4 km de rigor. Él se volvió para el coche, y yo seguí con la intención de completar los 20 km.
Así, ajustando, me salieron 20.016 metros de Fore, lo que refuerza mi teoría de cumplir el plan a rajatabla, jeje. Lo bueno es que como ya sólo quedaba por subir Somosaguas, los 10 km de esta segunda mitad salieron en 40:50 frenándome tanto como pude.
Por la zona del Lago vi a Yudus haciendo el loco (30 km dando vueltas a la parte final del Akiles), y a Jabo ultimando la preparación para San Sebastián con 2 Tapias 2.
Tras departir con este último, un poco de gimnasio: es la manera de compensar el no haber hecho muchísima gimnasia en la pretemporada, de modo que al menos de momento sigo tratando de meter dos sesioncitas de pesas.

Ayer estaba muy cansado, y llegué a Vicálvaro con la intención de ir con la pedalina, que diría Mora. Pero el caso es que poco a poco Dani y Vicente se pusieron a tirar como si tuviesen prisa por acabar el entrenamiento, jeje. Fui entrando en materia, y terminé por hacer los cinco bloques a una media justita de 54"-54.1". O sea, segundo y medio más rápidos que hace una semana. Eso sí, terminé reventao.
Y para seguir cumpliendo a rajatabla, Vicente me dijo: "Vas a dormirte rápido, pero a las dos horas igual ya no estás tan a gusto en la cama". Dicho y hecho. A las 23:30 me dormí, y antes de las 2:00 estaba danzando con los ojos como platos. Luego he dormido más o menos (más menos que más), y esperemos que el día no se haga muy duro. Hoy, encima, comenzamos de manera oficial con un nuevo proyecto: el radiómetro del Sentinel-3.



Powered by ScribeFire.

3.11.07

Por la radial

Hay varias autopistas radiales de peaje en torno a la capital. Pero hay una de ellas que se destaca del resto por la capacidad que tiene para aliviar el tráfico, muchas veces densísimo, que colapsa la autovía de salida al Levante. Especialmente en puentes, o al principio y al final de los períodos vacacionales, miles y miles de coches madrileños comparten unos cuantos kilómetros cuadrados de asfalto, lo que se traduce en atascos y embotellamientos de magnitud a veces colosal.

Para evitar esta tortura existe la radial R-3, de pago, pero que puede suponer incluso un ahorro en tanto en cuanto el coche no debe estar detenido interminablemente en el tráfico, con lo que eso significa de gasto de combustible, y de desgaste de la mecánica del coche en sí.

Obviamente, el R3 de los planes no sigue esta filosofía, si bien hilando un poco fino podemos encontrar el paralelismo: se trata de pagar un esfuerzo mayor que el del rodaje normalito, con el objeto de ganar velocidad y, a la postre, terminar por conseguir un ahorro global de combustible -energía- en el transcurso de la competición.

Con ese objetivo hemos hecho hoy los 10 km en la CdC. Tarde, pues anoche hubo un poco de sarao -sin exagerar: a las 4 estaba planchando la oreja-, y con bastante calorcito -tirantes en noviembre-. Se ha dado bien: hace dos semanas hubo dos bosques en 14:57 y 15:08. Hoy el pulso ha sido más alto, no sé si me habré exprimido en exceso, pero también hay que tener en cuenta que la temperatura y el no haber dormido mucho colaboran a elevar el pulso. Lo que es cierto es que los dos bosques y medio los he hecho con menos sensación de sufrimiento que hace quince días. Al final, 7:20 en los dos primeros kilómetros, y 14:56 - 14:54 en los siguientes bosques, lo que da un total de 37:10 y 3'43''/km de media, dentro de una semana de volumen ya considerable.

Por tanto, satisfecho. Y ahora voy a desempolvar la chupa de cuero, que voy a disfrutar de un conciertito/azo de primera: Dream Theater y Symphony X.


Powered by ScribeFire.

2.11.07

La Gran Vía

Fin de semana de puente. Buena temperatura (entre los 10º de las 10-11 y los 15º de la una del mediodía). Con estos condicionantes se pone el Bosque de la CdC que parece talmente la Gran Vía. Mañana igual hay que ir cediendo el paso en el R3, jeje.

La semana avanza sin pausa hacia los 100 kilometrillos, que según echo cuentas van a salir sí o sí: el martes hubo un aeróbico extensivo algo más lento que el de la semana pasada, pero como habitualmente los días de calidad corro en un terreno plano cual tabla de planchar, el martes decidí meter un buen extra de cuestas en la Dehesa de la Villa, que de eso anda sobrada. Así que fue un entrenamiento divertido, con su puntito de exigencia, en el que salieron unos 12 km.

El miércoles fue el segundo día de series de la semana. En este mesociclo ya empezamos a tener dos días de entrenamientos fraccionado, y la cosa se reparte entre un día -lunes- de repeticiones cortas (300, como dije en mi post anterior), y otro -miércoles- de repeticiones medias: 800 en este caso. No es una distancia desconocida, pues en los años previos he solido hacer mucha repetición de 800, 900 o 1000 metros. Pero sí la recuperación. En los planes que seguía antes se hacían los 800 con 2'15'' de recuperación, y a menudo en dos bloques.
Digamos que algo normal era un 2 x 5 x 800 r: 2'15'' y 5'. Ciertamente le veo más sentido a recuperar un minuto, como hacemos ahora, para los diezmiles o medias. En el caso de los miles, recuperaba 2'30'' habitualmente.
El caso es que la novedad este año consiste en ajustar los ritmos a las recuperaciones, más que a las series en sí. Así, el miércoles me encontraba comodísimo en los primeros 800 (hasta el cuarto), a ritmo de 2'45'', aproximadamente. Pero luego sufrí bastante para mantener el ritmo, y no bajar de una media conjunta de 2'44''.
Los primeros cuatro los hicimos en comandita: Chuky, Dani, Mario, Paco y yo, y en uno de cada dos se nos unía Miguelo. En un 800 hasta tuve los arrestos de tirar en la contrarrecta, para que Mario no se llevase todo el viento (que soplaba, para no variar mucho, en Vicálvaro), terminando algo más rápido que en el resto (2'42''). Pero luego fui notando esa escasa recuperación, y en loso dos últimos me enganché como pude a Paco para no caerme, mientras los galgos corrían por delante.
Lo bueno es que fui capaz de terminar sin bajar el ritmo, y que veo que el ir sobrado en la cuarta no quiere decir nada. El año pasado hacía miles a 3'23''-3'25'', acumulando seis, y recuperando 2' o 2'30'', cuando hice mis MMP's en torno a Aranjuez y la SSV. Así que si el otro día un 8x800 r:1' me salió a 3'25'' de media, creo que eso quiere decir que no estoy muy lejos de ese puntito de forma.
Cómo me como la olla, jeje.

Ayer, como digo, hubo rodaje en la Casa de Campo. Permuté el orden de la gimnasia y las cuestas, de modo que ayer rodé un ratito e hice las cuestas de rigor. 200 metros subiendo del cero del bosque al cartel del 200 de los del S2R, por el carril bici. Bien, con cierto cansancio de piernas, pero de menos a más (de 43'' a 38''). Al final hubo una de propina, pues fui con Luis, y él hizo diez en dos bloques: hicimos las cinco primeras juntos, luego me puse a rodar, y le acompañé en su última trepada.
Lo más impresionante fue ver el ambientazo que había: entre unos grupos y otros, no habría menos de cuarenta personas en el Bosque, algunos a ritmos de auténtica impresión (¡vaya zancada se gasta Alberto García, Dios!). Como digo, casi había que pedir paso, y a rato no sabía si estaba en el Bosque, en la Gran Vía o en el Cortilandia.

Y hoy, de nuevo a la CdC: rodajito tranquilo de 11 km para luego añadir una buena sesión de gimnasio. Mañana nos toca el R3, que consistirá en dos bosques y medio a ritmito. A ver cómo se da.
Me piro a yantar.


Powered by ScribeFire.

29.10.07

Los 300



Hombre, tan heroicos como Leónidas y los suyos, no somos, pero al menos hemos cumplido con el entrenamiento a pesar de que había un viento bastante asquerosito en la contrarrecta. Parece que estoy empezando a conocer Vicálvaro.
Anduvimos elucubrando cómo quitarnos el viento, pero no había manera de hacerlo razonablemente. Lo mejor para las ráfagas era salir en el 200 y acabar en la salida del 300, pero en 45" no da tiempo a llegar de nuevo al 200 caminando, o va un poco justo.
Total, que los hemos hecho todos de corrido, arrancando de donde parábamos en la repetición anterior. Y así es como nos hemos comido el 5 x 4 x 300, rec:45" y 3'.
En el grupo íbamos Mario, Dani, José Javier y yo. Bueno, es un decir, Dani iba cuando se conseguía controlar, Mario si le apetecía, y yo iba con ellos si se decidían a relajarse :-))

Así, he hecho los dos primeros bloques a 55,3" y 55", pero ya sintiendo el gancho y sufriendo en las repeticiones con aire. Ahí Mario y Dani han decidido ir un poco más lentos y taparnos el aire, con lo que los bloques tercero y cuarto se han ido a 56,5" y 55,8". Se notaba el cansancio, pero al menos notaba que podría terminar sin arrastrarme. El último bloque hemos apretado un poco más, y a mi me ha salido en 54,9".

Satisfecho. La mala noticia: a Juan le ha vuelto a visitar la rodilla. Esperemos que no sea nada.


Powered by ScribeFire.

La vuelta al cole

O a la Universidad.


Otros años no he corrido el cross de la que fue mi universidad, la UPM, debido a que la participación estaba cerrada a no universitarios. Sí, podría haber corrido por la Uned, pero no me apetecía andar imprimiendo cartas de pago para mendigar un puesto en la línea de salida. Así que por fin este año, con el cambio de política, me he estrenado. Además, me pilla al lado de casa de mis tíos, con lo que la idea era hacer la mañana completa: entrenamiento, carrera y visita familiar.

En la carrera me junté con Ángel y Luis, además de muchos otros conocidos con los que nos fuimos encontrando. Calentamos 7 km para ir reconociendo los toboganes que nos encontraríamos, y porque todos queríamos no sólo correr, sino entrenar, por lo que los 5 km del cross se nos quedaban cortos.
Unos progresivos, un poco de técnica de carrera, y a la línea de salida.

Mi idea era sustituir el R3 de la semana con el cross, de modo que haría la carrera a ritmo fuerte, pero no de competición. Aunque no me importaba ir un pelín más rápido que en un R3 al uso, pues la distancia era algo menor. Así las cosas, pienso en salir tranquilo, pero entre que coges sitio y que no me encontraba mal, hacemos el primer kilómetro, justo toda la subida hasta Pablo Neruda, en 3'42'' y sensaciones de mucha comodidad. Luego tenemos el recorrido casi a la inversa hasta volver a la línea de salida, esto es, un kilómetro de bajada en el que sin apretar nos ponemos en 3'23''.
El resto de la carrera fue ir enlazando subidas y bajadas de 500 metros, aproximadamente. No hay rampas brutales, pero sí pendientes acusadas que van minando el ritmo. Los kilómetros se suceden entre 3'30'' y 3'40'', y al final llego a meta con la sensación de sufrir un poco, pero sin llegar a la agonía propia de la competición. 18:05 para 5.080 metros, según el Garmin.
Con la suelta posterior, 14 km pal cuerpo.


View Larger Map

Ayer me levanté relativamente tarde porque el sábado hubo sarao. Así que hasta casi las 12 no arranqué en la CdC. Me hice un rodajito de 13 km por zona de cortafuegos, toboganes, y algo de llano por la zona del Bosque. A esas horas me sorprendió ver la cantidad de máquinas que andan sueltos por esos caminos de Dios.
Completé con técnica de carrera y gimnasio, hasta 50'. Así que aprovechamos bien la mañana.

Hoy empezamos mesociclo, dos días de series a la semana. De primer plato, los trescientos.


Powered by ScribeFire.

25.10.07

¿Y mañana qué hago yo?

No sabía si titular este post "Y al vigésimo día descansó", o como al final lo he titulado.

El caso es que llegamos ya al viernes de la tercera semana de este mesociclo. Mira que se dice siempre, que es una frase convertida en tópico, pero es que de verdad que desde este verano tengo la sensación de que el tiempo vuela, las semanas huyen y el calendario se escapa a marchas forzadas. Ya tenemos el fin de semana a la vuelta de la esquina, y casi ni me he enterado.

El lunes comenzamos las andanzas atléticas de la semana con el último día de gimnasia en Vicálvaro. Día raro, porque Mora se puso a hacer sus doscientos y no tuvimos la banda sonora habitual :-)
Fue un día de los habituales de gimnasia, con su calentamiento, su enfriamiento, y unos 55 minutos de cerita gimnástica para que las piernas se fuesen "contentitas" a la cama.

Anteayer, martes, tocaba un aeróbico extensivo en el que se me fue un poco la mano, digo las piernas. Me fui al Pardo, al recorrido que va de Somontes a la presa, que Ángel me descubrió hace ya tiempo. Comienza este recorrido por un camino de tierra compactada, casi completamente llano, de 4 km, hasta llegar al Pardo. Allí recorre unos 600 metros por asfalto, para entrar en un tramo de 2700 metros de senderito muy ondulado, subeybaja, junto al río, entre árboles, con sus mosquitos y sus jabalíes. Ya ves, animales de todo tamaño y condición. La vuelta, por el mismo camino, arroja un total de 14,65 km. Desde el principio fui un poco rápido (3'59'' en el segundo kilómetro), y al final no conseguí frenarme del todo, con lo que el rodaje salió a 4'08'', con buenas sensaciones, pero debería aprender a controlarme.

Ayer terminábamos con los 200 en Vicálvaro. No lo teníamos muy claro al principio, porque se puso a caer una chupa de agua de consideración. Pero al final la cosa se quedó en una lluvia fina que no impidió terminar con el 4 x 4 x 200.
Como la semana pasada, tocó sufrir unos metritos por detrás de los güenos, con un poco de envidia al ver su "desahogo", pero al final mejoré ligeramente los tiempos de hace siete días, sacando una media ligeramente inferior a los 35" por repetición.

Hoy, finalmente, rodaje regenerativo... en teoría. Como hablaba ayer con Vicente, es muy difícil controlarse. Más aún cuando los 200 no te dejan las piernas machacadas, sino ligeritas en comparación con los días de gimnasia. Así, lo que apetece es correr. Afortunadamente, en cuanto he visto un kilómetro por debajo de 4'20'' me he conseguido parar un poco, de modo que he terminado la horita a unos 4'25''. Más rápido de lo previsto, pero comodísimo.

Y como digo, tras 20 días consecutivos de entrenamiento, mañana hay descanso... ¡¿y qué hago yo?! Pues nada, algo habrá que buscarse, jeje. Me imagino que habrá tarde de paseo por el centro, de tiendas, y quizá de cine. Ya informaré.


Powered by ScribeFire.

21.10.07

... y van dos

Dos. Van dos semanitas de acumulación ininterrumpida. Ciertamente noto esa cantidad de días seguidos sin descanso, pero por virtud de la estructuración del entrenamiento, me canso pero no voy petao ni quemao. Como bien definió el míster, son semanas que cansan, pero que no sobreentrenan, pues la gimnasia (y/o el gimnasio) tiene esa virtud.

Así las cosas, el jueves hice el regenerativo con buenas sensaciones, sin ir arrastrando los 200 del día anterior, pero el viernes me encontraba un tanto arrastrado. Intuyo que el haber dormido menos de seis horas esa noche, y enlazar el entrenamiento con la salida del curro tuvo mucho que ver. Así que pené por la CdC, aunque me llegó para darme cuenta de lo verde y bonita que se ha puesto ya a estas alturas. Terminé con 10 cuestas de pendiente máxima, y luego añadí un poco de gimnasio para el tren superior.

El sábado tocaba el R3, y yo iba acohonao pensando en las malas sensaciones del día anterior. Sin embargo, me levanté relativamente bien, así que con algo más de confianza fui subiendo al bosque en una mañana realmente fría. Allí hice el primer bosque junto con Pino, un poquitín por delante de él hasta que en la recta del cero él cambió. Nacho iba cómodo, y desde el 3 se fue en solitario. El segundo bosque se me hizo bastante largo, y algo más lento que el primero. Lo bueno es que el pulso se mantuvo bajito (media de 171 ppm, y en el segundo bosque casi nunca pasé de 174 ppm), si bien tenía sensación de piernas pensadas y de no tener nada de cambio. Imagino que es la consecuencia del entrenamiento que estamos llevando. Como dato muy positivo, señalar que he comparado este rodaje con un 2,5 x Bosque de enero del año pasado, y me sale muy similar de ritmo y pulso, y entonces estaba en un momento fino fino. No creo que esto quiera decir que estoy como entonces, ni mucho menos, pero sí que vamos por el buen camino.

Y hoy, un día largo de narices. A las 7 de camino a la estación sur haciendo de taxista. Luego ya me fui al Cagigal para hacer 45 minutos de gimnasio, y luego rodar una horita comenzando muy suave, y terminando casi sin pisar caminos, un rodaje lleno de cortafuegos, cuestas y campo a través, con el último kilómetro un poco rapidillo, sin exagerar, para soltar las piernas. Luego, a Vista Alegre a ver al Madrís de baloncesto... y a las cuatro un siestorro tremendo.

Ahora, de nuevo, estoy vivo :-)


Powered by ScribeFire.

18.10.07

Entrando en materia

Es la sensación que tengo a lo largo de esta semana. La pasada, como ya dejé claro en mis anteriores aportaciones, fui un poco presa de la desubicación, de estar descolocado durante el viaje, de no saber muy bien dónde estaba. Para explicarlo un poco, aunque no sé si aclararé mucho las cosas, había veces las 10 de la mañana que, entre que ya había entrenado, y que durante el curso no había momentos de ocio (o currabas, o comías, o currabas, o dormías, aunque poco, o currabas o entrenabas), tenía la sensación de que era por la noche y me tenía que ir a la cama... y todavía quedaban 14 horas de día por delante.
Esta sensación ya la he tenido en otras ocasiones: recuerdo cuando me volví de Hamburgo, los últimos meses estuve muy liado con el trabajo, la mudanza, estudiar... y a menudo iba en el tren por la mañana con esa misma idea, de estar por la noche y necesitar acostarme... no por cansancio real, sino por la sensación de llevar mucho tiempo activo, sin verdadero momento para relajarme.
Pero esta semana todo es diferente. Ya he dormido parte de lo que me debía a mi mismo, he vuelto a entrenar por las tardes-noches, y si no fuese por el calor que aún tenemos, parecería que nos estamos encaminando de verdad al invierno. Entiéndase, no es que haga calor de verdad, pero son temperaturas raras para un Madrid en el que se suele pasar del agobio veraniego al frío invernal en dos telediarios.
Para terminar de redondear la sensación de entrar en materia, ya hemos comenzado con las series en grupo. El lunes hubo gimnasia (verisón exprés por la junta del club), el martes un buen extensivo, a unos 4'12'', y ayer el 5 x 4 x 200. Desde el principio fui un poco rápido comparado con la semana pasada, a pesar de que en primera instancia no quise, y luego no pude seguir, a Mario, Chuky, Dani y Vicente. Me fui dejando unos metritos por repetición, que a la postre fueron los necesarios para terminar el entrenamiento y que el entrenamiento no terminara conmigo. Satisfecho por mantener los ritmos y mejorar un segundo respecto de la semana anterior, solateras y en Bremen.
Hoy tocaba el regenerativo, bien y cómodo. Con el pulso ya entrando en valores bajitos -vamos pillando la forma- y la sensación de no ir petao de piernas... es curioso que es lo que he sufrido hasta el martes: creo que el extensivo del martes, y el mucho dormir de ese día obraron milagros.
Hoy incluso me he regalado 10 minutos de skipping.
Mañana nos iremos a la CdC, imagino, a pegarle un poco a las cuestas y quizá algo de gimnasio para el tren superior, que hace tiempo que lo tengo un pelín descuidado.


Powered by ScribeFire.

15.10.07

Vuelta a casa

Escribo esto en el avión de vuelta a Madrid. Es una vuelta a casa, a la realidad, a la rutina… una mezcla de sentimientos encontrados. Por un lado, la semana ha sido agotadora, por lo que saber que esta noche duermo en casa y que poco a poco vamos a ir entrando en el tran tran habitual de una semana normal como tantas otras, suena como un horizonte prometedor, que me permitirá recuperarme de unos días largos y muy ajetreados. Además, en lo puramente atlético, perdón, chustiatlético, vendrá bien para poder entrenar sin más impedimentos que los que me son consustanciales. O sea, lo paquete que soy.

Pero, por otro lado, este paso por mi querida Norddeustchland, incluyendo dos breves estancias de fin de semana en Hamburgo, me ha dejado un sabor extraordinario en la boca. Ahora siento ese regusto de placer, de felicidad, de nostalgia y de recuerdos que se agolpan en la cabeza y más abajo. Ayer llegué con el tren de Bremen, y me fui raudo a casa de mi amigo Fernando, donde me eché una buena siesta de dos horitas para reponerme un poco. Vendría bien para aguantar por la noche, ya que habíamos quedado con Antonio, otro viejo conocido, y una buena tropa multinacional, para pasar la velada en un garito de Altona. Hay cosas que no cambian, y la atmósfera, el ambiente, se mantienen, aunque me di cuenta de que el Duschbar ya no es tal, y que ahora va y se llama Bargo. Buena noche, muy larga, prolongada hasta las 6, pero parecía que me quería demostrar a mi mismo que aún estoy joven, y a pesar de que hoy justo enfilo la recta final hacia los 30 (escrito esto el 14 de Octubre), me he levantado de la cama al poco de abrir los ojos, a eso de las 11. Hemos desayunado, y me he ido a hacer el R3 en el Alster.

Vaya pedazo de día. Impresionante. Ni una sola nube, temperatura fresca pero muy agradable, y muchísima gente que a ratos ha convertido el R3 en un eslalon complicado. Pero no se ha dado nada mal, creo. Calentamiento en el que pensaba que el Garmin se había vuelto loco, pues resulta que estaba rodando con sensación de tocarme las bolas e iba a 4’10’’, pero luego se ha confirmado que iba a ese ritmo.

El R3 comenzando muy tranqui, aunque al final siempre se nota el esfuerzo. Máxime cuando hoy ya pasábamos de 6 a 8 km. He hecho un pelín menos para completar justo una vuelta (7400 metros), pero las sensaciones han sido buenas, especialmente por no ir con el gancho, y sólo forzado justo al final.

Luego, comida cerca del Alster, exquisita, y un poco de estrés en el aeropuerto con una curranta de la Lufhansa con poquitas luces.

Y aquí estoy, escuchando Thunder y esperando llegar a Madrid para reengancharme a la rutina, como decía. Mañana no habrá S-Bahn, no habrá WG, no habrá rodaje en el lago. Toca gimnasia en Vicálvaro… y también me apetece mucho.

13.10.07

Vaya semanita

Uf, ha sido muy interesante, mucho, pero también cansado. He pasado la semana completa haciendo un curso por medio del curro, en las inmediaciones de Bremen, y estos días han sido una combinación de charlas, trabajo en grupo, buen comer, muy poco sueño, y entrenamientos a horas intempestivas.

El día habitual comenzaba, desde el punto de vista lectivo, a las 8:30, tras el desayuno, y se prolongaba a lo largo de toda la jornada con alguna pausa de 15 minutos para el café, o bien de una hora para la comida y la cena, respectivamente. Hasta el miércoles fuimos acostándonos a horas bastante razonables, pero el jueves y el viernes hubo que prolongar el tabajo bastante tiempo, así que en ambas ocasiones no olí la cama hasta la 1:30 o las 2 de la madrugada. Afortunadamente, el trabajo nocturno se amenizaba merced a los señores Becks y Fransziskaner, ofertados de manera gratuita por el curso :-).

Así las cosas, no quedaba más remedio que hacer los entrenamientos de madrugada. He conseguido seguir el plan con bastante fidelidad, aunque alguna pequeña variación ha habido que meter, claro. Imagino que los ritmos habrán salido algo más lentillos por la cosa de empezar a darle a la zapatilla entre las 6:15 y las 6:45, pero tampoco me han dejado insatisfecho (beneficios de entrenar a 5 o 6 graditos y al nivel del mar). Lo dejé en el rodaje del martes, un extensivo a buen ritmito.

El miércoles hice unos kilómetros y unos 35 minutos de gimnasia. Bien por lo que toca a la voluntad, y es que verse en un bosque a esas horas, casi a oscuras, pegando saltos de un lado para otro, te hace pensar que estás un poco loco, jeje. Pero los ejercicios en sí me costaron bastante: iba cargado de piernas por la acumulación de entrenamientos y por la hora. Pero es lo que hay.

El jueves, regenerativo al canto, con sensaciones bastante mejores. Algo más de doce kilómetros en un poco menos de una hora, que sirvieron para oxigenar (un poco) las bielas.

Más difícil sería lo del viernes: ¿dónde carajo encuentro yo unas cuestas ahora? Unas cuestecitas empinadas iban a ser misión imposible, así que me puse a buscar algo que al menos tirase un poquitín parriba. Rueda que te rueda, me meto por un caminito agropecuario, y aquí me llevé el susto: perraco tremendo que me ve correr por la zona, y se viene a por mi con una determinación que acojona. Y aquí decido probar lo que parece más razonable, pero también difícil de hacer: las piernas te piden salir corriendo, pero eso creo que sería contraproducente, así que me paro (antes paro el crono y el Garmin, que uno es un vicioso, y aunque sea hecho trizas por el perro, quiero tener los datos del rodaje), no hago frente al perro y tampoco salgo corriendo, sino que poco a poco camino y me voy alejando. En principio no para, se sigue acercando y ladrando, camino, camino, camino… y al final no deja de ladrar, pero se detiene. Madre, qué mal rato. Pero mira, termino por seguir rodando sin más contratiempos. Y al final encuentro 100 metros en cuestecita, ligera pero cuestecita al fin y al cabo, y le pego 10 subidas a todo trapo (lo que en mi caso de fondista malo y velocista lamentable es ir pisando huevos). Termino soltando. En este caso no soltaba para relajar las piernas, sino para que se me bajasen los huevos, que seguían a la altura del cuello.

Y hoy, rodaje sin gimnasia ni nada, el R3 lo haré mañana. Ha salido más rápido que lo presagiado por las menos de cinco horas de cama, pero tampoco ha sido la octava maravilla del mundo.

Ahora voy de camino a Hamburgo, y me acabo de dar cuenta de que el mamón del portátil me ha perdido el archivo Excel de los entrenamientos. Así que me va a tocar pasar un tiempecito con el sw de Polar para recuperar todos esos datos. Cagonlalecheputa. Menos mal que esta noche me espera esa maravillosa ciudad. Qué gran regalo para mañana, jeje.

9.10.07

Sonrisas y lágrimas


¿Nos vamos a dedicar a hablar de cine, en luar de carreritas y entrenamientos? Ésta es la pregunta que te puede asaltar al leer el título de este post. Y no sería descabellado, porque seguramente podría llegar a hacer aportaciones más valiosas que vertiendo entrenamientos, competiciones y reflexiones de una chusta en zapatillas. Pero como tampoco me veo capacitado para escribir sobre cine con coherencia, profundidad y capacidad de atracción, lo dejaremos tal y como está.

El fin de semana ha sido muy intenso: comenzó con las cuestas del viernes en el JC-I, a las que se añadió el trote posterior preparando la carrera del Decathlon. Esta actividad, que desde el punto de vista meramente deportivo se dio bien, puso un halo de preocupación y de dolor en torno al pie izquierdo, que no deja de quejarse y de darme una impresión un tanto rara… lágrimas enjugadas por la cena tapiera, exquisita y, sobre todo, divertidísima, disfrutada en excelente compañía: sonrisas.

Sonrisas que se repitieron a lo largo del sábado con el buen resultado de la carrera del Decathlon y, sobre todo, con mi llegada a Hamburgo. Dos minutos en la ciudad y parecía que nunca me había ido. Me senté en el S-Bahn con una sonrisa tonta y eterna dibujada en la cara, henchido de emoción, a ratos conteniendo el llanto que quería participar en la fiesta de mi regreso a la ciudad hanseática. La felicidad era casi absoluta, aún más rotunda al encontrarme con Fernando, con quien pasé una velada encantadora.

Y el domingo por la mañana se redondeó la dicha: mañana fría, soleada, otoñal, luminosa. Un calentamiento unido al R3 de la semana en torno al Alster, precioso, con buenas sensaciones. Y casi sin dolor, para terminar de coronar mi alegría.

El día no había hecho sino comenzar, y lo aproveché a tope paseando por la cuna de tantas satisfacciones pasadas, bañado por el sol tibio empeñado en revelarme la mejor de las caras de Hamburgo. A mediodía, tras un brunch apetitoso en Schanze, cogí el tren a Bremen, donde nos juntamos los compañeros del curso que me tiene fuera de casa durante esta semana.

Ya desde el lunes estamos en las afueras de Bremen. Ayer hice los 5 x 4 x 200 del plan. El entorno es precioso, y he encontrado una buena recta para hacer el entrenamiento. Buenas sensaciones a pesar de la hora, ayudado por una temperatura agradable y una niebla húmeda que invitaba a darle duro a la zapatilla. Y al terminar, lágrimas: dolor, pero no en los pies, donde se mitiga, sino en las piernas, que se han llevado una buena zurra.

Hoy, 15 km a buen ritmito y casi en la oscuridad absoluta.

4.10.07

Se presentaron las piernas... y algo más

Parecían las piernas tener un aguante infinito. Me avisaron los colegas de que después de Navafría, el domingo no tendría ganas de calzarme las zapatillas. Muy al contrario, lo pasé bien en la carrerita del BBVA, fruto de correr a un ritmo no suave, pero tampoco muy fuerte. Lo justo para disfrutar de una velocidad de crucero sin la necesidad de forzar la máquina.
Tampoco en el rodaje posterior por la CdC me encontré agobiado, con dolor de piernas ni nada por el estilo.

El lunes había la gimnasia vicalvareña, elemento ideal para cascarse las piernas a base de bien. Añadimos algunos ejercicios de regalo para los cuádriceps que presagiaban un martes doloroso... pues tampoco, parece que el rodaje del martes, si bien no absolutamente redondo y fácil, tampoco se hizo excesivamente cuesta arriba.



Sin embargo, ayer ya notaba yo un nosequé por las bielas. Pero como somos un tanto masocas, la lluvia, la tormenta, y ese fin del mundo que parecía amenazarnos desde el cielo (ése que se caería sobre nuestras cabezas, como decían en los tebeos de Astérix), no nos arredraron, y nos dimos cita unos cuantos para darle de nuevo a la gimnasia en la pista de Vicálvaro. En la pista, claro, porque el césped no era tal, sino que parecía un arrozal de la Albufera. Así, se sucedieron los saltos, la técnica de carrera y finalmente el ejercicio del miranda, que consiste en hacer como que te sientas a ver un partido de júrgol, pero sin asiento, y cuando te quieres dar cuenta y desvías la mirada de ese jugador con gorrilla y chándal remangado, te percatas de que te queman las piennas.

Así que hoy ando con los cuádriceps pidiéndome responsabilidades por lo de ayer. No me preocupa. Más mosca me tiene, sin embargo, un dolor que no va a más, pero que no se termina de ir, en el exterior del pie izquierdo. Lo conozco, porque fue una tendinitis de hace tres años que me hizo parar durante diez días. Así que espero ir tanteándolo y viendo su evolución, a ver si se va aburrido, o si al final tengo que tomar otras medidas.


Powered by ScribeFire.

2.10.07

Nueva temporada, nuevo curso

Llevaba tiempo desaparecido de la escritura del blog, así que a ver si lo retomo y voy dejando constancia de lo que va ocurriendo en este mi mundo del corredor chustilla.

Hace realmente más de un mes que hemos comenzado con la nueva temporada: el 21 de Agosto volví a rodar tras los días de bici por los Picos de Europa, al principio con mucha incomodidad y una pesadez tremenda. Poco a poco lo dejamos en rodar con incomodidad y pesadez, ni mucha ni tremenda, pero tampoco como si estuviese en forma, claro. En esos primeros días fui haciendo algo de gimnasia y técnica de carrera por mi cuenta... o eso creía yo, jeje.

En Septiembre me he incorporado al grupo de Vallehermoso del Paris. Y ciertamente aquí sí que hemos empezado a hacer gimnasia de verdad, de la que consigue dejarte recuerdos para el día siguiente. Los primeros días tenía la sensación de que sí, que esto era un nuevo curso, pero además con todas las letras. Me parecía estar en medio de una clase de EF, haciendo ejercicios, pegando botes y demás. Y, sinceramente, no dejo de encontrarle ese lado lúdico, reforzado por el buen ambiente que se vive en estas sesiones. Hay tiempo para comentarios y risas de todo tipo, lo que se agradece un montón y hace muy llevadero un esfuerzo que siempre está presente. Por el momento, encantado con el grupito y los entrenamientos.

Y a ver si, como decía ayer Vicente, seguimos quedando en la Casa de Campo los domingos para hacer gimnasia. El día que así fue lo pasé muy bien, primero con los ejercicios de saltos y técnica, y a continuación con esas famosas colinas finlandesas que te van minando las piernas a medida que escalas por las paredes cercanas a la subestación eléctrica. Pero como siempre, la presencia del grupo hace que el entrenamiento sea llevadero y se disfrute mucho.

En cuanto a las competiciones, todavía estoy muy desconectado, porque aún no toca. Vamos rodando, haciendo gimnasia y demás, pero hasta la semana que viene no olemos las repeticiones. Que en este caso serán de 200. Así las cosas, este domingo me metí en la carrera del BBVA a acompañar a Carlos Matraco, que quería salir a 3'55''/km o así. Como siempre sucede en estos casos, la carrera salió más rápida de lo esperado inicialmente, de modo que acabamos en 18:36 los 4,95 km que medía la cosita. 3'45'' de media en un circuito muy cómodo para correr, además de bonito.

Esta semana no habrá nada. O mejor dicho, sí, pero desde el otro lado: la carrera del Decathlon en Sanse. Y nada más terminar: ¡a Hamburgo!


Powered by ScribeFire.

30.7.07

Temporada 2006-2007 (y IV)

Mayo (332 km)

Y aquí comienzo con el último de los capítulos destinados a resumir esta temporada.

Como dije, terminé el mes de Abril con sensaciones agradables en mis últimos entrenamientos por Noordwijk y Londres, lo que se tradujo en un moderado optimismo para terminar la preparación de la media de San Sebastián, preciosa carrera a la que me encanta asistir... aunque todos los años llego un pelín pasado de forma y kilómetros, y encima parece que el tiempo se empeña en no acompañar en exceso, como así fue una vez más.

La semana anterior volví a no tenerlas todas conmigo en un entrenamiento de series largas (4 x 2000 en el Bosque), en el que no conseguí en ninguno de los casos bajar de los 7 minutos. No obstante, la semana precompetitiva me sentó bien y llegué a Donosti con ganas... que se diluyeron cuando me levanté y vi 19º a las 7 de la mañana en el termómetro más próximo a casa de Ángel. Así pasó, salimos sabiendo que no había marca posible, a pesar de lo cual hice una carrera que me dejó razonablemente satisfecho (1:18:30), dadas las circunstancias. A las dos y media, tras la carrera, el calor ya era sofocante...


El resto del mes fue de poca chicha, con la excepción del cross del Barrio del Pilar, donde me encontré realmente bien y creo que hice una carrera notable. Entonces, sí, con fresquito y casi casi lluvia. Como a mi me gusta.

Desde entonces la idea era bajar de kilómetros, hacer alguna carrera algo más rápida, y cerrar la temporada.

Junio (226 km)

Comienza el mes con la Legua de Torreiglesias (en realidad poco más de 5 km), carrera que creo que se me dio bastante bien. Me encantó el ambiente que se respiraba en un recorrido duro, tres vueltas a un circuito de subidas y bajadas, disputado a toa leshe, y muy divertido. Coincidí con Pablo Vega en la carrera, un tío muy majete y humilde. Hizo segundo reservándose un pelín para correr una milla al día siguiente.

En la Carrera de Carabanchel (10 km) salí conteniéndome, sabedor de que la subida por General Ricardos se las habría de traer. Así fue: la carrera era bastante dura, con el añadido del cuestón en el kilómetro 8 de regalo, pero me pareció bonita y entrañable. Un sub-36' por los pelos para cerrar la temporada de asfalto.

Y para terminar, un 5000 en pista (Fuenlabrada), ya pidiendo la hora en lo que a mi (escasa) forma se refiere. 17:11 y gracias, sufriendo mucho pero sintiendo que estaba escuchando la llamada del tartán, jeje.

Julio (epílogo)

Termina la temporada con un breve coqueteo con la pista. Un 3000 en Arganda supone una nueva decepción: no completa, porque sé que no estoy en forma, pero al menos me habría gustado bajar de la barrera de los diez minutos. No pudo ser, y me quedé en 10:11.

En las semanas siguientes disfruté un montón de los entrenamientos específicos para el medio fondo, preparando así el mil popular con el que nos íbamos a despedir del Estadio de Vallehermoso. Al final la cosa salió bien ese día, con un 2:59.64 que me permitió rebajar por los pelos una de esas fronteras míticas del chustiatletismo popular. Pero como digo, lo más importante es que la pista me ha gustado mucho, y que el año que viene me la voy a tomar en serio, sin duda.

Así se acabó la temporada, con un salto de rendimiento en el invierno mucho mayor de lo que me habría podido imaginar, pero no refrendado con una mejora continua a lo largo de la primavera.
El año que viene, más y mejor, y ahora en el Paris, comenzando una nueva etapa llena de ilusión.

Por el momento, nos damos a la bici, que también me encanta, y para la que en estos días sí puedo sacar tiempo.


Powered by ScribeFire.

25.7.07

Temporada 2006-2007 (III)

Penúltimo capítulo de esta recopilación, concluida en el mes de Enero, a la espera ya de la media de Granollers.

Febrero (258 km)

Bajón de kilómetros por la competición y semi-descanso posterior.

El mes arranca de la mejor manera posible: con lo que considero, por ahora, la carrera de mi vida. Llego a la línea de salida de la Mitja de Granollers sintiéndome con muchas ganas de correr. Un estupendo fin de semana en casa de Miguel, a quien conocí en el Camino de Santiago el verano anterior, es sólo el preludio de 21.097 metros en los que me encontré extraordinariamente bien, donde lo di todo y alcancé un rendimiento que ni yo me podía haber imaginado. Como anécdota, señalar que no le di al crono al arrancar, así que lo puse en marcha al paso por el km. 1 y pregunté el tiempo que llevábamos. Esto me hizo comerme mucho la cabeza, pues me tiré los últimos 5 kilómetros pensando en que iba a hacer un muy buen tiempo... y temiendo estar haciendo mal el cálculo, sumar erróneamente ese km que me faltaba al principio, de modo que el resultado final no podría ser tan bueno. Al final resultó que calculé bien, y llegué a la meta tras disfrutar 1:15:30.

La semana siguiente me la tomo de calma, y este mes ya sólo voy al Trofeo Ecozar de Fuenlabrada (10 km), donde estreno el juguetito del Garmin. No quedo muy satisfecho con la carrera (35:57), aunque el perfil es duro y hacía un viento tremendo. Termino el mes con el cross de la UAH, donde me sale buena carrera y concluyo con moral.

Marzo (314 km)

Mes clave en el asalto a la MMP de 10 km, si bien no salieron los resultados esperados. Me da la sensación de que llegué en Diciembre a la meseta del estado de forma, y a lo largo de Febrero, tras la Mitja, fui descendiendo ligera y lentamente.

Así las cosas, hago buenos entrenamientos, especialmente los largos, si bien creo que a la Intercampus Leganés-Getafe (10 km) llego demasiado cansado. Por lo que sea no conseguí competir al pulso razonable. Y entre esto, y que el perfil no era tan favorable como lo pintaban, no conseguí ni siquiera bajar de 35 minutos, cuando me quería acercar a los 34.

Fue diferente la Carrera de Laredo (10 km), una carrera de grandísimo nivel, excelentemente organizada, y con todos los condicionantes para hacer MMP. Lo malo fue que la semana previa anduve con muchos problemas de muelas, lo que me dejó entrenar poco y mal y me mermó la confianza. Aun así, salí a por todas y casi se da bien. Pasé el 5000 a buen ritmo (17:10), pero la lluvia y el viento de la segunda vuelta me mataron, de modo que me tuve que conformar con un peladísimo 34:51, tercera marca de la temporada.

Abril (343 km)

Llegan cambios. Empiezo de manera excelente tras Laredo, con buenísimos entrenamientos esa semana en Cantabria. Pero al poco tiempo me tengo que desplazar por trabajo a Noordwijk (Holanda), y la situación me descoloca. Los horarios con difíciles en principio, y encima pillamos la entrada de una ola de calor (casi 30º en Holanda, en Abril, increíble) que me deja chafado en algunos entrenamientos.

Aun así, no termino con malas sensaciones, y los últimos días, ya de viaje en Londres, consigo encadenar buenos entrenamientos que me dan moral para seguir preparando la media de San Sebastián.


Powered by ScribeFire.